Kit básico de brochas de maquillaje que tienes que tener y para qué sirven

Te maquilles mucho, poco o casi nada (solo en ocasiones muy puntuales) necesitas un kit básico de brochas de maquillaje en tu neceser. Para que aplicar ese maquillaje sea más sencillo y obtengas los resultados esperados.

Y para que tengas claro qué es lo que necesitas y no comprar más de la cuenta, hemos hecho este consejo en el que te detallamos las brochas más básicas, cómo utilizarlas y cómo puedes ampliar el kit siempre que quieras.

Vamos a empezar primero por diferenciar entre brochas y pinceles. Que forman parte del mismo kit, sí, pero no son lo mismo.

• Las brochas son las que utilizamos para el rostro (base, maquillaje, colorete, polvos…) son más grandes y más densas en general.
• Y los pinceles son los que utilizaremos para maquillar los ojos.

Dentro de nuestro KIT DE BROCHAS DE MAQUILLAJE básico, te contamos cuáles tienen que estar en tu neceser.

Brochas para el rostro en tu kit básico de maquillaje

Podríamos decir que las brochas que son imprescindibles para maquillarte el rostro serán un mínimo de 2 a 4. Dependerá de tu tipo de piel y de si necesitas los productos que te comentamos a continuación.

Brocha para base de maquillaje (fluido y en crema), el básico de tu kit

Un aspecto en común que verás en todas las brochas de las que te vamos a hablar en este post, es que cada una tendrá su diferentes tamaños. Aquí el consejo de los expertos siempre es el mismo: opta siempre por la brocha pequeña o de tamaño medio, que será más manejable, sobre todo si estás empezando, para que te sea más sencillo aprender a utilizarlas.

Dicho esto, en cuanto a brochas para extender la base de maquillaje en general hay de tres tipos:

• Las biseladas (pueden ser rectas o redondeadas)
• Las redondeadas
• Y las de corte recto

El tamaño de esta brocha, intenta que tenga como dos dedos de ancho y céntrate en la forma: que sea redondeada. Aquí puedes elegirla biselada (pero siempre con forma redondeada en la parte superior, no recta) o simplemente redondeada. Porque las brochas para extender la base de corte recto suelen integrar peor el maquillaje y dejar brochazos. Y sin embargo, las que tienen cantos más redondeados dejan un acabado más natural.

La densidad del pelo de estas brochas es alta y suelen tener también una firmeza media-alta. Con firmeza nos referimos a flexibilidad, sus pelos tienen que tener la suficiente para adaptarse a tu rostro. Y son suaves (no tiene que picar). Comprueba todo esto antes y recuerda, tiene que ser una sensación gustosa la de utilizarla en tu rostro, no tiene que irritar tu piel ni molestar.

Este tipo de brocha están recomendadas para aplicar bases de maquillaje líquidas o en crema, pero como son muy fáciles de utilizar y superversátiles, con ella podrás aplicar cualquier producto de maquillaje en crema. Las expertas beauty la denominan la brocha todoterreno (por eso es la fundamental en cualquier kit de brochas). Así que si solo quieres comprarte una brocha de maquillaje para empezar, con esta podrás aplicar la base, el corrector, el bronceador, el iluminador y el colorete si utilizas en crema o líquido (en este orden).

Brocha plana de precisión o de pico de pato

Esta brocha es superútil para aplicar la base de maquillaje y el corrector (productos en crema o líquidos), no solo en la zona de la ojera si no también en esas partes de tu rostro de más difícil acceso donde quieras corregir (las aletas de la nariz por ejemplo). Porque su forma hace que se pueda adaptar a diferentes formas en tu cara con precisión.

La puedes utilizar también para hacer contorno… si tu maquillaje es más pro.

Pero si te apañas con la brocha anterior, también sería viable prescindir de esta brocha.

Aquí no suele haber mucha variedad de tamaños, y normalmente es una brocha con densidad alta y flexibilidad media. Lo que sí estamos viendo es que se puede sustituir por brochas con otras formas… pero de momento, y para empezar, nos quedamos en esta para no complicar la cosa.

Brocha para mejillas en tu kit básico de brochas

Estas brochas las utilizarás para aplicar colorete y bronceador.

Aquí puedes elegir dos tipos de brocha, dependiendo de qué tipo de productos apliques en tu mejilla: en polvo, líquido o crema.

La más versátil es esa brocha de corte biselado, recomendadas para aplicar productos en líquido o en crema en las mejillas. Lo bueno de estas brochas es que son muy versátiles y como puedes ver en este vídeo de Ratolina, también podrás aplicar el colorete en polvo e incluso tus polvos para sellar el maquillaje en la zona de la ojera y del ojo de forma efectiva.

Pero si los productos que utilizas en la mejilla son definitivamente en polvo, opta por una brocha con forma redondeada.

Ambas coinciden en que tiene un tamaño medio (como la de la base de maquillaje), pero quizá con el pelo un poquito más largo. Lo que sí que tienes que tener en cuenta son estos dos factores: densidad y firmeza (como en todas).

En las brochas para las mejillas interesa que tengan una densidad media (cuanto más densidad más producto coge, así que aquí nos interesa bajar la densidad con respecto a la de maquillaje) y una firmeza media (cuanto menos firmeza, o sea más flexibilidad, más capacidad de difuminar).

Lo que te decimos, en cuanto a tamaño, que no difiera mucho de tu brocha de base de maquillaje.

Brocha para polvos para sellar el maquillaje

Esta sin duda es la brocha más prescindible de este kit básico de brochas porque si tu tipo de piel es seco, seguramente no necesite matizar el maquillaje. Si tu piel es grasa, dependerá de la época del año, pero es posible que sí que la necesites.

Este tipo de brocha redondeada, con densidad y firmeza media, y con el pelo más largo que la primera brocha de maquillaje, está pensada para aplicar polvos, translúcidos y compactos, de forma precisa.

Cuanto más pequeña sea la brocha, más precisión encontrarás.

Empieza por una brocha con densidad y firmeza media, que sea más flexible, para que no coja mucho producto y con menor tamaño para que tengas precisión sobre dónde poner el maquillaje.

Como ves en la imagen podrás encontrarlas las típicas brochas de polvos (la primera) o una con una punta más en pico.

Brocha para iluminador (en polvo)

Otra de las brochas totalmente prescindibles, a pesar que como verás, esta brocha tiene unas características muy concretas para que podamos aplicar el iluminador en polvo correctamente.

Esta brocha sigue siendo redondeada como las anteriores pero es mucho más pequeña y tanto la densidad como la firmeza es tirando a baja. Esto es para coger muy poco producto y que lo difumine muchísimo. El tamaño es pequeño porque lo vas a aplicar en un zona pequeña, y de nuevo, necesitas precisión. Sobre todo porque no quieres toda la cara brillante.

Los pinceles para ojos que necesitas en tu Kit básico de brochas

Como hemos explicado arriba, en pinceles nos referimos básicamente a las brochas que utilizamos para el maquillaje de ojos. Y aquí necesitaríamos, al menos estos tres.

Nuevamente insistimos en el tema de tamaños… hay tantos como puedas imaginar. Y quizá puedes necesitar varios tamaños si eres de maquillarte a menudo. Si estás empezando, con uno de tamaño medio-pequeño, valdría.

Pincel para ojos de lengua de gato, el más conocido en cualquier kit básico de brochas

Este es el pincel de ojos que todo el mundo tiene porque hasta hace unos años, prácticamente era el único que se utilizaba en casa. Planos y con forma redondeada en la parte de arriba.

Con él vas a aplicar productos con pigmento (sombras de ojo en su mayoría) en polvo, líquido y crema… podrías difuminar, sí, pero es más difícil.

Cómo tiene que ser este pincel: tiene que tener una densidad alta y una firmeza media. Que tenga mucho pelito pero que sea suave de aplicación y el pelo se adapte a tu ojo sin dañar (recuerda además que es una zona muy sensible, tiene que ser (repetimos) gustosito aplicar con este pincel). Si es demasiado dura va a ser incómoda y además no va a depositar el pigmento en tu ojo, se va a quedar en el pincel.

Pincel para difuminar con forma de llama

Estos pinceles son redondos (no planos) y tiene forma redondeada por arriba. Son menos compactos aunque también son densitos.

Estos pinceles en realidad son todoterreno porque podrás utilizarlo solo para aplicar color, solo para difuminar o para aplicar y difuminar al mismo tiempo. Si lo vas a utilizar con un producto en crema, solo servirá para difuminar, eso sí.

De nuevo en este tipo de pincel de maquillaje puedes encontrar varios tamaños. Aquí Ratolina nos recomienda tener uno grande y uno pequeño.

Con el grande podrás aplicar, de forma muy sutil, color por todo el párpado móvil y difuminar zonas más grandes. Este necesitará un poquito más firmeza que el pequeño, para que difumine e integre el color mejor. Y con el pequeño podrás ser más precisa a la hora de aplicar la sombra en zonas más pequeñas y a difuminar, por ejemplo la V exterior.

Pincel para delinear

Opta aquí por los pinceles biselados planos y el tamaño, dependerá un poco de tu gusto. Si vas a iniciarte en este mundo del maquillaje con ellos, repetimos, opta entonces por uno mediano-pequeño para empezar a manejarlo.

¿Cómo lo vas a utilizar? Puedes utilizarlo para delinear sombras, delineadores en gel y con tus lápices de delineado.

Y hasta aquí el Kit Básico de Brochas que necesitas para maquillarte. CUÉNTANOS si echas en falta alguna brocha o cuál es la básica para ti.

Fotos de Pexels y Canva.

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