Así se prepara la barbacoa perfecta

Conseguir la barbacoa perfecta no es cosa fácil. Se necesita paciencia, una buena planificación y seguir alguna que otra técnica para conseguir ese sabor jugoso y ahumado tan característico del verano. Si no estás seguro de cómo conseguirla, no te preocupes que aquí te traemos paso a paso una guía sencilla para preparar una barbacoa de la mejor manera y así impresionar a tus amigos y familiares en esta época del año. ¡Con varios trucos incluidos!

Y vamos a empezar por el principio. Aunque suene muy obvio: antes de tener tu barbacoa o tu parrilla, tienes que tener en cuenta algo importante:

• Necesitas un lugar seguro donde colocarla. Una chispa o un despiste puede ocasionar un verdadero problema. Así que lo mejor es prevenir desde el principio y ubicarla en el lugar adecuado.
• Y recuerda: una vez tengas el fuego encendido, la barbacoa no debe quedarse sola nunca. Es tu responsabilidad.

Una vez esto esté claro… llega el primer paso 👇👇

1. Consigue la barbacoa adecuada

Para ello, lo primero que tienes que tener claro es la diferencia entre parrilla y barbacoa: la barbacoa tiene tapa, la parrilla no 🙂

Puede parecer obvio, pero tener la barbacoa adecuada es fundamental para que sean un éxito. Lo mejor es tener una de carbón y no de gas, para así conseguir ese sabor ahumado que todos queremos.

También es importante que te decidas por una barbacoa de calidad, evita las que sean muy baratas y ten en cuenta que vas a cocinar en ellas: necesitas estabilidad y que sus materiales sean seguros para que no afecten a tu alimentación (una barbacoa barata puede suponer pintura desprendida en tu comida a los pocos usos, por ejemplo).

¿Ya tienes la barbacoa de tus sueños? Genial, pues recuerda.

¡Mantenla limpia! Otra obviedad, puede ser, pero hay que tenerlo en cuenta. Lo mejor es limpiar la barbacoa después de cada uso, cuando aún esté caliente. Si la fiesta se ha alargado y no se ha dado el caso, caliéntala antes para limpiarla bien al día siguiente…. ¡no esperes más!. Retira todo y después podrás usarla de forma saludable y sin tener sabores indeseados.

2. Cuida el combustible y haz un buen encendido

Aquí está quizá el punto más importante para conseguir que tu barbacoa sea perfecta.

Para que encender la barbacoa sea un éxito, primero tienes que tener claro varias cosas:

1. Elegir un buen combustible
   No vale el primer carbón barato que encuentres en cualquier tienda, muy fácil de encender pero cuyas brasas durarán un suspiro.
   Tienes que hacer una inversión y hacerte con un carbón decente, que aguante tus brasas. Dentro de la calidad media está el carbón de encina, aunque hay más variedades que además mejorarán el resultado de tu cocinado. Asegúrate de que los trozos de carbón sean grandes.
   Lo puedes hacer con leña, pero aquí debes tener en cuenta que el tiempo para generar la brasa sará mucho mayor que el carbón.
2. Calma a la hora de encenderlo, no vale de nada las prisas
   Encender la barbacoa lleva su tiempo, requiere de paciencia hasta que se generan las brasas. Si lo haces con carbón, calcula entre 45-60 minutos desde que enciendes (dependerá mucho del tipo de carbón que elijas).
   Si elijes leña, ya sabes que más.

Si te apetece aportar el sabor de la leña, puedes hacer mezcla con el carbón.. aunque quizá este paso no es muy recomendable para novatos y sí cuando tengas ya cierto manejo de las barbacoas.

¿Cómo encender la barbacoa perfecta?

Puedes recurrir a las típicas pastillas, pero hay trucos naturales que dejarán mejor sabor en tu comida (y evitarás su desagradable olor).

Tal y como explica Juan Manuel Benayas, al que llaman el «Rey del carbón», en este post de Directo al Paladar, lo ideal «es usar una caja de fruta (de madera) llenarla de carbón y prenderla por debajo con papel de periódico. También se pueden usar piñas o ramitas».

Lo siguiente importante que hay que tener en cuenta, es que el fuego hay que oxigenarlo, y para ello nada mejor que tener a mano el atizador y asegurarse de que tu fuego permanece encendido y está respirando. Evita echarle muchas cosas encima para conseguirlo.

Existe también la Chimenea de encendido, un invento para las barbacoas que simplifica y mucho el sistema de encendido, asegurándote unas brasas homogéneas en tan solo 10 minutos. Es un añadido a tu barbacoa que la va a encarecer… pero lo va a simplificar todo mucho más. Especialmente este paso que quizá es uno de los más difíciles.

3. Planifica el menú y ten la comida a la temperatura correcta

Si lo piensas, la barbacoa fue el primer sistema de cocinado que utilizó el ser humano. O sea que se puede cocinar prácticamente de todo. Y cuando decimos de todo, no nos referimos solo a carne. El pescado queda todavía más delicioso, el marisco… y por supuesto las verduras, que no pueden faltar.

¡Tenlo en cuenta a la hora de planificar tu menú y no lo limites a lo de siempre 🙂 !

Una vez tengas claro qué vas a cocinar… anota estos consejos:

• Es importantísimo tener atemperada la comida que vayas a preparar y que no salga directamente de la nevera. Sácala de ella con una hora de antelación porque si no, se te pegará más fácilmente, y costará más cocinarla.
• Si vas a cocinar carne mayoritariamente, recuerda que cada carne tendrá su tiempo de cocinado, procura no mezclar y organizar los tiempos.
• Cuando cocines chorizo, morcilla o butifarra … puedes pincharlas un poco para que se hagan bien por dentro.
• Evita echar la sal antes del cocinado y sobre todo, cocines lo que cocines, evita moverlo mucho o darle más de dos vueltas.
• Cuando vayas a cocinar piezas gruesas, como un chuletón o un entrecot, ten en cuenta si tu parrilla tiene varias alturas para modular tú la temperatura. Si no es el caso, procura cocinar carnes que no superen los 2 centímetros de grosor.
• Si vas a cocinar pescado, procura pintar con aceite la parrilla para que no se pegue, o utilizar un rejilla especial para pescados.
• Cuando cocines verduras, píntalas con aceite y procura cortarlas en trozos finos y lo más uniformes posibles. Y si el tiempo de cocción de esa verdura es muy largo, prueba a cocerla antes para que el cocinado en la barbacoa dure menos y el resultado sea mejor.

Y recuerda una máxima: es mejor no llegar que pasarse. Es decir, que el producto que estés cocinando quede crudo, mejor que muy hecho. Lo primero se puede corregir, lo segundo no.

4. Consigue la temperatura perfecta

Es muy importante controlar el fuego igual que lo haríamos con el horno. La técnica más utilizada en España es la del fuego directo: o sea toda la base cubierta de brasas. Pero hay una técnica más sencilla, que es poner el carbón a un lado de la barbacoa (o a los lados), para así tener una parte muy caliente y otra sin brasa directa.

Para controlar la temperatura de tu fuego, es importante utilizar el atizador, esa herramienta de cualquier parrilla o barbacoa con la que irás moviendo las brasas en la dirección que quieras para aumentar el calor o disminuirlo en la parte que más te interese.

4. Las guarniciones

Son igual de importantes que los platos principales y, por suerte, no es muy difícil conseguir las guarniciones perfectas. Desde maíz asado (que puedes asar envolvíendo las mazorcas en papel de aluminio con mantequilla y tus hierbas favoritas durante 15-20 minutos, con brasa indirecta) hasta una ensalada de sandía con queso, dependerá del gusto de tus invitados. Lo primordial es tener suficiente cantidad para todos.

5. La bebida

Otro factor que hará tu barbacoa perfecta… o un desastre. Lo importante es que tu bebida tiene que estar bien fría. Puede ser agua, cerveza, vino tinto, zumos… ¡lo que te apetezca! Lo mejor es colocar una neverita llena de hielos cerca de la mesa para que los invitados puedan servirse cuando quieran.

6. Las herramientas para tu barbacoa perfecta

Cuando vayas a colocar la comida en la barbacoa, utiliza una espátula o unas pinzas. Para que tu comida no pierda jugosidad, intenta no darle la vuelta más de dos veces y nunca utilices un tenedor para ello.

7. Resumimos trucos para una barbacoa perfecta

• Saca la carne de la nevera por lo menos una hora antes de empezar a asarla, ya que se cocina mejor si está a temperatura ambiente.
• La mejor distancia para colocar la parrilla son 10 cm, para así conseguir que la comida se haga poco a poco.
• Paciencia. No empieces a cocinar hasta que el carbón no alcance un color blanquecino.
• El test de la mano. Si no estás muy seguro de haber conseguido la temperatura ideal, puedes colocar la mano a unos 12 cm por encima de la parrilla. Si aguantas 2 segundos, el fuego está muy alto; si aguantas 5, está medio; y, si aguantas 10, está muy bajo.
• No pongas la sal en la carne antes de asarla. Así mantener su jugosidad.
• Para aumentar el sabor, puedes añadir a la parrilla trozos de madera de árboles frutales, como manzana o melocotón. Además, puedes colocar estos trozos de madera en agua la noche de antes, enrollarlos en papel de aluminio y colocarlos en la parrilla para obtener todavía más sensación.

¡Anímate a hacer barbacoas este verano con este tutorial!

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